Estás por iniciar tu vida en una nueva casa. Tal vez has pasado meses buscando el lugar perfecto para ti y tu familia, encontraste un buen financiamiento, lograste el mejor trato y después de que todos los astros se alinearan, estás listo para mudarte… Hasta que de pronto te das cuenta de un pequeño detalle que por alguna extraña razón no habías notado… Y ahí comienza el dolor de cabeza.
Como sabes, adquirir una casa es una gran inversión, por eso es importante prestar atención a varios factores para asegurarte de que estás haciendo una buena compra y evitar llevarte sorpresas desagradables en el futuro.
Si hablamos del inmueble en sí, es importante que antes de hacer cualquier trato inspecciones los siguientes aspectos:
- Terreno: Revisa el terreno en el que se encuentra la casa, asegurándote de que esté en buenas condiciones y que no presente problemas de estabilidad, erosión, contaminación o drenaje.
- Estructura: Verifica que la estructura de la casa esté en buenas condiciones y que no tenga problemas de cimentación, fisuras o grietas importantes en las paredes.
- Techos: Inspecciona el estado del techo para que tengas la certeza de que no hay filtraciones, roturas o daños importantes. Verifica si le han realizado reparaciones recientes.
- Instalaciones: Asegúrate de que las instalaciones eléctricas y de plomería estén en buen estado y sean seguras; y si la casa cuenta con sistema de calefacción y aire acondicionado, cerciórate de que funcionen adecuadamente.
- Ventilación: Comprueba que la casa tenga buena ventilación y que no haya problemas de humedad. Checa los baños y la cocina para saber si cuentan con sistemas de ventilación adecuados.
- Aislamiento: Asegúrate de que la casa tenga un buen aislamiento térmico para evitar problemas de humedad y pérdida de calor.
- Ventanas y puertas: Verifica que las ventanas y puertas estén en buen estado, que abran y cierren correctamente y que sean seguras.
- Tamaño y distribución: Piensa en cuántas habitaciones necesitas, el tamaño de la cocina y los baños, si necesitas espacio de almacenamiento y si hay suficiente espacio para ti y tu familia. Revisa que la distribución de la casa se adapte a tus necesidades y preferencias.
- Edad de la propiedad: Las casas más antiguas pueden requerir más mantenimiento y reparaciones, considera cuánto estás dispuesto a gastar en el mantenimiento y reparación de la propiedad a largo plazo.
- Ubicación: Es una de las consideraciones más esenciales al comprar bienes raíces así que busca en una zona que se adapte a tus necesidades y estilo de vida, y que tenga fácil acceso a las comodidades y servicios que necesitas como transporte público, tiendas, escuelas y hospitales.
Adicionalmente, existen otros aspectos que debes analizar antes de hacer tu elección de vivienda:
- Revisa la documentación relacionada con el inmueble, como el título de propiedad, los impuestos y los permisos de construcción, de esta manera podrás asegurarte de que todo está en orden y que no hay problemas legales o financieros que puedan afectar tu inversión.
- Por supuesto, el precio es uno de los factores más importantes al comprar una casa. Compara los precios de las casas similares en la zona para determinar si el precio es justo. También considera tu presupuesto de manera realista para determinar si te puedes permitir comprar la casa que estás considerando.
- Investiga el vecindario para saber si es un lugar seguro y agradable para vivir. Considera la calidad de las escuelas, los índices de criminalidad y los servicios locales, como tiendas y restaurantes.
Nuestra última recomendación es que te tomes el tiempo necesario para investigar y comparar diferentes propiedades antes de tomar una decisión final y recuerda que asesorarte con un agente inmobiliario te garantiza mejores resultados al momento de invertir.
