Cuando iniciamos el recorrido para comprar o vender un inmueble, es muy grande la tentación de llevar a cabo todo el proceso por nuestra cuenta, sin meternos en complicaciones para contratar a un agente inmobiliario y además, pagarle por sus servicios. Sin embargo, negociar una propiedad inmobiliaria es un proceso complejo y exigente en términos de tiempo, esfuerzo y conocimientos legales, financieros y fiscales.
Es aquí donde se vuelve relevante la figura de un agente inmobiliario, quien puede encargarse de muchas tareas, como buscar inmuebles, programar visitas, realizar negociaciones y coordinar trámites. Esto te ahorrará tiempo considerable especialmente si tienes una agenda ocupada o no estás familiarizado con el proceso de compra-venta. Y además, evitará que caigas en situaciones que pongan en riesgo tu patrimonio.
Por supuesto, también es importante saber escoger al agente inmobiliario que te ayudará en tu proceso.
Estos consejos te ayudarán a elegir un buen agente inmobiliario:
- Experiencia y reputación: Busca un agente inmobiliario con experiencia en el mercado local. Pregunta por cuánto tiempo han estado en el negocio y solicita referencias de clientes anteriores. Además, investiga su reputación en línea y lee reseñas o testimonios de otros clientes para tener una idea de su desempeño y nivel de satisfacción.
- Conocimiento del mercado: Es importante que el agente inmobiliario tenga un profundo conocimiento del mercado en el área donde estás buscando comprar o vender una propiedad. Deben estar al tanto de las tendencias actuales, los precios de las propiedades y otros factores relevantes que puedan afectar tu transacción. Pregunta sobre su experiencia en la zona y cómo se mantienen actualizados sobre el mercado local.
- Afiliación: Verifica si el agente inmobiliario está debidamente registrado en los organismos reguladores correspondientes. Esto asegurará que esté operando legalmente y cumpliendo con los estándares profesionales. Además, al estar afiliado a organismos inmobiliarios te ofrece una mayor seguridad, ya sea que vendas, compras o rentes una propiedad.
- Comunicación y habilidades interpersonales: La comunicación efectiva es clave en una transacción inmobiliaria exitosa. Busca un agente inmobiliario que sea accesible, responda rápidamente a tus consultas y se comunique de manera clara y efectiva. También es importante que tenga buenas habilidades interpersonales y sea capaz de establecer una relación de confianza contigo. Puedes evaluar esto durante la primera reunión con el agente.
- Estrategia de marketing: Si estás vendiendo, pregunta al agente sobre su estrategia de marketing. ¿Cómo planea promocionar tu propiedad y llegar a los compradores potenciales? Un buen agente inmobiliario tendrá un plan sólido para maximizar la visibilidad de tu propiedad y atraer a compradores potenciales.
- Honorarios y términos de servicio: Discute abiertamente los honorarios del agente inmobiliario y los términos de servicio antes de comprometerte. Asegúrate de entender claramente cómo se estructuran los honorarios y qué servicios se incluyen. No tengas miedo de negociar los términos si sientes que es necesario.
- Servicio al cliente: Un buen agente inmobiliario estará dispuesto a dedicar tiempo y esfuerzo para entender tus necesidades, responder tus preguntas y brindarte asesoramiento profesional. Busca referencias de clientes anteriores para obtener información sobre la calidad del servicio que ofrece.
Recuerda que es importante sentirte cómodo y tener una buena relación de confianza con tu agente inmobiliario. Tómate el tiempo para conocer a varios agentes, hacer preguntas y tomar una decisión, ya que aunque son muchas las variables a considerar para elegir un agente adecuado, será mucho más sencillo que encargarte por completo del proceso de compra o venta de una propiedad.