Mezclar varios productos de limpieza no solo no nos dará mejores resultados si no que puede significar un serio riesgo para la salud e incluso provocar accidentes que pongan en peligro nuestra vida. Por esta razón, hoy te presentamos una lista de los productos de limpieza que nunca debes mezclar.
Comencemos con las mezclas que involucran Al producto de limpieza por excelencia:
EL CLORO
Para uso doméstico se comercializa el hipoclorito de sodio al 5 %, lo que popularmente conocemos como cloro. Como todos sabemos, este producto, incluso solo, debe utilizarse con muchas precauciones pues puede provocarnos intoxicaciones y quemaduras serias. Sin embargo, utilizado de manera adecuada es un excelente producto para limpieza y desinfección.
Debe utilizarse diluyendo 20 ml de cloro en un litro de agua, sin mezclarse con ningún otro producto de limpieza. Esta solución puede utilizarse para limpiar pisos, paredes y superficies; al terminar, debes ventilar el área que limpiaste con cloro y una vez que esté totalmente seca y ventilada la superficie, entonces sí se puede utilizar otro limpiador.
La recomendación es no mezclar el cloro con ningún otro producto por las reacciones químicas que puede desencadenar, pero debes ser especialmente cuidadoso evitando las siguientes interacciones:
- Con ácidos como limón, vinagre o productos que contengan ácido clorhídrico. Pueden crear cloro gaseoso, el cual es altamente tóxico y producir quemaduras graves, afectar las mucosas de la nariz, boca y pulmones e incluso inducir paros respiratorios.
- Con alcohol. Al combinar cloro con alcohol se produce cloroformo y ácido clorhídrico, compuestos químicos altamente tóxicos, cuyos vapores pueden producir daños en la piel, en el sistema nervioso, hígado y ojos. El cloroformo específicamente puede detener el diafragma (un músculo encargado de la respiración) provocando un paro respiratorio.
- Con amoniaco. El cloro y el amoniaco es una de las combinaciones más comunes; sin embargo, al mezclarlos se generan altas cantidades de cloraminas, sustancias muy tóxicas y corrosivas que provocan daño a los pulmones y el hígado. También pueden causar irritación en las mucosas, ardor en los ojos y quemaduras en la piel. Inhalarlas puede generar problemas respiratorios como tos y asma.
De acuerdo a la Gaceta UNAM, las cloraminas y el cloroformo son sustancias que tienen hepatotoxicidad y son cancerígenas, y aunque la afectación no se presente de manera inmediata, "su uso continuo tendrá un efecto acumulativo y a largo plazo generará problemas como cáncer de hígado”.
- Con otros productos de limpieza, pues muchos de ellos contienen precisamente amoniaco y como ya explicamos en el punto anterior, la reacción química entre ambas sustancias es muy tóxica para nuestra salud. Es importante recordar que mezclar productos de limpieza también puede generar daño a las superficies a las que se las aplicamos, debido a las reacciones químicas que se producen en su interacción.
COMBINACIONES EXPLOSIVAS
- Al mezclar agua oxigenada con cloro se producen cloratos o percloratos, sustancias que se utilizan en los explosivos. Al combinarlos puedes generar calor y provocar una explosión.
- El agua oxigenada más vinagre (ácido acético) es una combinación que también puede ser explosiva (literalmente). Además, puede causar irritación en la piel y los ojos y afectaciones al sistema respiratorio.
- También debes evitar el uso de vinagre con bicarbonato de sodio, una combinación muy socorrida para quitar manchas, pero si realizas la mezcla en un recipiente cerrado puedes provocar una explosión.
- Tampoco es recomendable utilizar alcohol para limpiar pisos, pues es un compuesto altamente inflamable.
Recuerda que cuando utilizamos productos de limpieza lo más importante es leer las instrucciones del envase y apegarse a ellas, los fabricantes saben perfectamente con qué sustancias no deben interactuar sus productos.
Conocer los ingredientes de los productos que utilizamos y seguir las instrucciones al pie de la letra es la mejor manera de evitar accidentes en el hogar.