Comprar una casa o departamento es una de las grandes decisiones que tomarás a lo largo de tu vida y lo que decidas en ese momento te acompañará, para bien o para mal, durante décadas.
Especialmente cuando se trata de tu primera compra de bienes raíces, hay algunos errores comunes que puedes evitar si prestas atención a todo el proceso y te tomas las cosas con calma.
Los errores más comunes al momento de comprar una casa:
- Calcular mal la cantidad mensual que puedes pagar por la hipoteca
El principal error que se comete al comprar una casa es no ser realista con nuestra capacidad de pago. Calcular el monto mensual que podemos pagar de hipoteca es fundamental para evitar problemas a largo plazo.
Por regla general, los asesores financieros te dicen que el monto de tu hipoteca no debe superar el 30 por ciento de tus ingresos mensuales. El problema está en el hecho de que hacemos este cálculo sobre el 100 por ciento de nuestros ingresos, pero en realidad debemos calcularlo sobre los ingresos disponibles. Es decir, a tus ingresos mensuales debes restarles tus gastos comunes (servicios, alimentos, medicamentos, educación, transporte, pagos de otras deudas…); cuando tengas la cifra de tus ingresos disponibles, entonces sí calcula el 30 por ciento y esa será la cantidad máxima que deberías pagar por una hipoteca.
Además, es importante visualizar tus gastos a futuro. Tal vez al momento de comprar no tienes hijos, pero en los años que durará tu hipoteca puede que te decidas a ser padre lo que incrementará considerablemente tus gastos.
La hipoteca es un compromiso a largo plazo y al no ser realistas con tu capacidad de pago estarás condenándote a 15 o 20 años en los que sufrirás para llegar a final de mes y quizá te privarás de vacaciones o no podrás hacer remodelaciones a la vivienda o comprar un auto nuevo.
- No tomar en cuenta los gastos extras
Cuando queremos comprar una vivienda muchas veces nos olvidamos que el préstamo bancario no cubre los gastos adicionales como el enganche, la escrituración, los impuestos, el avalúo, las reparaciones o adecuaciones que la casa necesite e incluso, la mudanza.
Por principio, hay que tomar en cuenta que la mayoría de las instituciones financieras que ofrecen préstamos hipotecarios solo te proporcionan hasta el 80% del valor del inmueble, lo que significa que tú deberás contar con el 20% restante para dar el pago inicial.
Además, tendrás que realizar el pago de impuestos y escrituración y otros gastos que detallamos previamente en el post “¿Qué impuestos debo pagar al comprar o vender una casa?” que puedes consultar en nuestro blog.
Un error que debes evitar cometer es pedir otro préstamo para hacer frente a estos gastos, pues son deudas que se van acumulando a tu hipoteca y que pueden hacerte pasar muchos problemas para saldarlas si no cuentas con los ingresos suficientes.
Incluso si el préstamo te lo da un familiar o un amigo y no causa intereses, al final son obligaciones financieras que debes enfrentar; así que, si todavía no tienes el dinero suficiente para hacer estos pagos, es preferible que te des el tiempo necesario para ahorrar y poder pagarlos sin recurrir a préstamos asfixiantes.
- Dar un enganche muy bajo
Aunque por lo general al comprar una vivienda te piden un pago inicial de al menos el 20 por ciento, puede llegar a presentarse la “oportunidad” de comprar tu casa sin enganche o con un pago mínimo. Este tipo de técnicas utilizadas por los vendedores pueden parecer atractivas cuando no cuentas con el dinero suficiente para el enganche, pero es uno de los errores más graves que puedes cometer, pues lo que sucederá es que terminarás pagando más intereses al banco e incluso, alargado la duración del pago de la hipoteca.
- Escoger mal el préstamo hipotecario
Otro error común al momento de comprar casa es no hacer una comparación de hipotecas para encontrar el préstamo que sea mejor para tu situación financiera.
Escoger bien tu hipoteca es fundamental para evitar que tu crédito te ponga entre la espada y la pared. Antes de firmar cualquier contrato, es importante que te informes bien sobre lo que es una hipoteca, cómo funciona, las tasas de intereses, los plazos y los costos.
Acércate al menos a dos o tres bancos para que te informes de los diferentes préstamos hipotecarios y puedas comparar lo que cada uno ofrece, de modo que tomes una decisión informada.
- No inspeccionar la vivienda
Aunque signifique un desembolso significativo, cuando se trata de una vivienda usada es muy recomendable contratar a un inspector para que verifique las condiciones en las que se encuentra el inmueble, de esta manera te aseguras de que no existan problemas ocultos que puedan provocarte gastos mayores.
Comprar un inmueble es una decisión que requiere un análisis profundo de tu situación financiera, tus necesidades presentes y futuras, así como de tus gustos e intereses. Antes de firmar un contrato, tómate el tiempo necesario para elegir la mejor opción para ti. No importa que el vendedor diga que es una oportunidad única y que debes tomarla antes de que alguien más lo haga. Una hipoteca te acompañará durante muchos años por eso hay que analizar todos los pormenores con detenimiento.