¿Quieres comprar un inmueble y en tu búsqueda apareció una oferta que parece irresistible? Alto: la opción más barata, no siempre es la mejor y aquí te explicamos por qué.
Dejarse llevar por el precio más bajo no siempre es la mejor opción, especialmente cuando estamos hablando de inversiones inmobiliarias. Más allá del precio de un inmueble, al analizar tus opciones de compra es necesario poner el foco en el valor real de la propiedad que tienes en la mira.
¿Qué hay detrás de un precio bajo?
Antes de seguir es importante poner las cartas sobre la mesa: un inmueble barato no necesariamente te ahorra dinero a largo plazo. ¿Por qué?
- El factor obvio: una casa o departamento cuyo precio de venta sea muy bajo probablemente requiera mucho trabajo (e inversión) para reparaciones y mantenimiento. Los requerimientos pueden ser desde pintura interior y exterior, impermeabilización o arreglar puertas y ventanas, hasta plomería en mal estado y un sistema eléctrico que requiera una intervención urgente y costosa. Si vas a comprar un inmueble barato debes estar consciente de que es posible que se encuentre en mal estado y que deberás asumir el costo de las reparaciones.
- Otro factor determinante: la ubicación. Puede ser que sea un inmueble en excelentes condiciones o incluso nuevo, pero ¿qué sabes de zona en la que está ubicada la propiedad? ¿Es un área problemática, insegura? ¿Cuenta con todos los servicios públicos? ¿Cuál es el desarrollo a futuro del sector? ¿Existen proyectos para desarrollo de negocios que no sean compatibles para una zona habitacional? Si la propiedad está ubicada en una zona conflictiva, no solo se verá afectada tu calidad de vida, sino también el valor a largo plazo del inmueble.
- Y, no menos importante: El estado legal de la propiedad. ¿Revisaste ya cuál es el estatus actual del inmueble que quieres adquirir? ¿Existen hipotecas o algún tipo de gravamen sobre ella? ¿Hay alguna disputa legal para determinar la propiedad del inmueble? Es muy común que, en medio de disputas legales por bienes raíces, alguna de las partes involucradas decida vender, sin tener el permiso para hacerlo. Así que, revisa los antecedentes y estado legal de cualquier inmueble antes de realizar cualquier movimiento.
Como lo hemos platicado en anteriores publicaciones, el precio de un inmueble se define a través de múltiples factores. Pero más allá del precio que pueda tener una propiedad en venta, hay otros factores que debes considerar para conocer su VALOR real:
- Ubicación
- Seguridad
- Accesibilidad
- Superficie
- Número de habitaciones y baños
- Distribución
- Antigüedad de la propiedad
- Estado de mantenimiento
- Oferta y demanda
Entonces ¿cómo puedes asegurarte de que un inmueble con precio bajo sea una buena inversión para ti? Aquí algunas claves:
- Compara los precios del mercado inmobiliario. Es importante que investigues los precios de inmuebles similares al que te interesa que estén ubicados en la misma zona, así tendrás una idea del valor de mercado. Una revisión en portales especializados o hablar con agentes inmobiliarios te permitirá tener una visión general de los precios de la zona.
- Realiza una inspección profesional de la propiedad. Un experto en el tema podrá detectar si el inmueble que te interesa tiene problemas que tú no veas a simple vista. Al determinar qué renovaciones necesita, podrás negociar el precio con el vendedor, para así asumir el costo de reparación. O si los problemas son graves, desistir de la compra.
- Piensa a largo plazo. En estos momentos la propiedad que estás analizando es barata ¿pero tiene potencial a futuro? ¿Existen planes de desarrollo que en un tiempo razonable generen plusvalía para tu inversión? ¿O, por el contrario, puede convertirse en una zona que se deprecie?
Como puedes ver, dejarse llevar por una ganga no siempre es una buena idea, especialmente cuando hablamos de una inversión considerable como son los bienes raíces. Así que antes de dar el paso definitivo para la compra, analiza estos puntos clave que te hemos presentado para que determines si verdaderamente vale la pena.
Y si tienes dudas, siempre puedes recurrir a asesores inmobiliarios que están preparados para evaluar ese tipo de ofertas.