Antes de proceder con la compra de una propiedad es muy importante realizar una inspección del inmueble, de modo que puedas revisar que no tenga vicios ocultos, aquellos “detalles” que pueden quedar escondidos debajo de una capa de pintura.
Estos son algunos de los aspectos físicos que debes verificar antes de comprar una propiedad:
- Revisa que los muros, techos y pisos de la vivienda se encuentren en buen estado y que no tengan cuarteaduras o fisuras que puedan significar un problema mayor. Verifica también que no presenten humedad.
- En tu inspección hay un punto al que debes poner especial atención: la revisión de las instalaciones de agua, electricidad y gas. Asegúrate de que funcionen de manera adecuada, que no existan fugas o conexiones dañadas, pues si se encuentran en mal estado pueden provocar serios daños no sólo al inmueble, sino también a las personas.
- Las filtraciones de agua son comunes si el inmueble no ha recibido el correcto mantenimiento; por eso es esencial que verifiques el estado de los techos y muros y en caso de encontrar goteras o filtraciones, realiza una revisión más extensiva de la estructura de la vivienda pues a la larga, esto puede significar daños más graves para tu propiedad.
- Asegúrate de que ventanas y puertas deslicen bien y que cierren correctamente. Además, cerciórate de que existen cerraduras y llaves para las puertas.
- Analiza las condiciones generales de mantenimiento del inmueble, observa detenidamente toda la vivienda para asegurarte de que se encuentra en buen estado.
- Cerciórate del funcionamiento de equipo como el calentador o la bomba de la cisterna, así como de los electrodomésticos como la estufa y el horno que pudieran estar incluidos como parte de la casa.
- Si estás por adquirir un departamento o la vivienda se encuentra en una privada, es fundamental que también realices una inspección de las áreas comunes y pongas especial atención en el mantenimiento que reciben. Por ejemplo, revisa que el elevador trabaje correctamente y si existe una piscina, pregunta a los vecinos con qué frecuencia se realiza su limpieza.
Verifica la propiedad de la casa
Además de los aspectos físicos, es primordial que antes de iniciar cualquier trámite para la adquisición de una vivienda verifiques quién es el propietario del inmueble. Esta información es pública y puedes acceder a ella a través del Registro Público de la Propiedad. Si la casa está en copropiedad, debes asegurarte de que todos los propietarios estén de acuerdo en la venta.
Vale la pena recordar que cuando existe una hipoteca sobre un inmueble, el banco es el propietario, por lo que no puede ser sometida a un proceso de compraventa hasta que sea liberada.
También cerciórate de que la vivienda en cuestión no arrastre deudas y verifica que los pagos de servicios como la electricidad o de impuestos como el predial se encuentren al corriente, pues si existen adeudos, al momento de realizar la compra tú los heredarás y deberás hacerte cargo de su pago.
Comprar una casa es una decisión importante y para asegurarte de que el inmueble se encuentra en buenas condiciones, es recomendable realizar varias visitas a diferentes horas del día, pues esto evitará que pases por alto “detalles” que pongan en riesgo tu inversión.