Hoy queremos platicarte de los créditos mancomunados, una excelente alternativa para que dos personas puedan obtener un préstamo hipotecario mayor al que de manera individual podrían alcanzar para comprar una vivienda.
Los créditos mancomunados
Tener tu propia casa es un objetivo que la mayoría de las personas nos planteamos en algún momento de la vida, pero muchas veces lo vemos casi como un sueño irrealizable porque creemos que el crédito que podemos obtener no es suficiente para conseguir la vivienda que tenemos en mente y nos resignamos a comprar un inmueble muy alejado de nuestras pretensiones o de plano, a seguir pagando renta.
Sin embargo, existe una alternativa de la que no se habla mucho cuando queremos comprar una casa: los créditos hipotecarios mancomunados. Se trata de un préstamo que dos personas pueden obtener de manera conjunta para comprar un inmueble y que, como consecuencia de la suma de ingresos, permitirá obtener un financiamiento mayor; esto ayudará a los interesados a conseguir una casa más grande o en una mejor ubicación.
En México los créditos hipotecarios mancomunados son una realidad y no se limitan a matrimonios, sino que pueden entregarse a parejas que no tienen un vínculo legal, familiares en línea directa (como padre e hijo), parejas del mismo sexo e incluso a amigos que deciden comprar juntos.
Ventajas de contratar un crédito mancomunado:
- Al unir ingresos, tendrán acceso a un préstamo mayor para la vivienda
- Podrán pagar un enganche más alto, lo que reducirá el monto del financiamiento solicitado al banco
- Serán dueños del inmueble en partes iguales
- Tendrán las mismas responsabilidades y beneficios respecto al inmueble
- Es posible conseguir una tasa de interés un poco más baja porque los bancos ven menor riesgo cuando hay dos personas responsables del pago
- Si ambos cuentan con prestaciones laborales como Infonavit, podrán unir sus subcuentas de vivienda para que el enganche sea mayor.
¿Cómo funcionan los créditos hipotecarios mancomunados?
Como ya mencionamos, este tipo de créditos no requiere que los contratantes estén casados, pues pueden otorgarse a parejas que viven en unión libre además de a familiares en línea directa y amigos.
Al solicitar un crédito mancomunado, la institución financiera tomará su decisión con base en los ingresos de ambas partes lo que aumenta las posibilidades de que el préstamo sea otorgado, que se dé un monto mayor de financiamiento y recibir mejores condiciones del crédito.
Ambas partes firmarán el contrato, aunque la persona con mayores ingresos será quien aparezca como "acreditado" y la otra persona será el "coacreditado".
El préstamo se pagará de manera conjunta de acuerdo a los montos acordados al momento de firmar, que puede ser una suma equitativa para ambas partes o bien, la persona con más ingresos hará una aportación mayor a la mensualidad.
La buena noticia es que ambos tendrán los mismos beneficios y responsabilidades sobre el crédito y el inmueble y al terminar de pagar, ambos serán los dueños.
Este tipo de créditos están disponibles tanto en instituciones financieras privadas como en el Infonavit, que en el año 2020 creó el programa Unamos Créditos, que amplía los préstamos mancomunados a parejas sin un vínculo legal, a familias y a amigos.
Al igual que con un crédito hipotecario individual, para decidir contratar un mancomunado es importante que ambas partes hablen claramente sobre sus ingresos, deudas y capacidad de pago, pues se trata de una obligación financiera importante que condicionará su chequera durante varios años.
Así que antes de acercarte a una institución crediticia, te aconsejamos que cada uno revise sus finanzas de manera individual y determine su capacidad de pago. Después, deberán analizarlo en pareja para tener un panorama más real del financiamiento que pueden obtener.
Un consejo final: asesórate sobre el tema de la copropiedad, así como los derechos y obligaciones que implica un crédito de estas características, pues recuerda que, al adquirir tu casa a través de este esquema, ambas partes adquieren el derecho de propiedad sobre el inmueble.
